Spoiler: su eliminación progresiva supondría el 52% de la reducción de emisiones necesaria para limitar el calentamiento global a 2 ºC. Ya que se compensaría casi el 70% del calentamiento de esas emisiones. Es por eso que la disminución o eliminación de la agricultura animal debe estar en lo más alto de la lista de posibles soluciones climáticas.
Los gases de efecto invernadero que emite la agricultura animal o ganadería, como lo son el dióxido de carbono (CO2), metano, óxido nitroso y amoniaco, contribuyen al calentamiento global y al cambio climático. Su contribución es tal, que si tan solo sustituyeramos el consumo de rumiantes (vacas y ovejas) por proteínas vegetales, se lograría una reducción del 90% de la emisión de dichos gases. Combinado con un cambio de dieta a una basada en plantas, detendría durante 30 años el aumento de los gases de efecto invernadero en la atmósfera.
“Si la agricultura animal se eliminara gradualmente en 15 años y todas las demás emisiones de gases de efecto invernadero continuaran como ahora, la eliminación crearía una pausa de 30 años en las emisiones netas de gases de efecto invernadero y compensaría casi el 70 % del efecto de calentamiento de esas emisiones hasta el final del siglo”.
Patrick Brown, profesor emérito del departamento de bioquímica de la Universidad de Stanford.
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